martes, 1 de febrero de 2011

El viaje de vuelta

La mini comida que servían en el avión

Voy a escribir esta entrada en "tiempo real"...algo así com Jack Bauer en la serie 24.
Por que la inquietud de generar un nuevo post en este momento? Porque me encuentro en el vuelo de vuelta a mi querida Argentina! Querida! Claro que sí! No veo la hora de estar en mi cama tirado escuchando el disco rígido de mi cpu de fondo, y el puntito rojo del televisor pegándole en el ojo derecho.
El abordaje a este avión fue definitivamente con el pie izquierdo, tras una serie de sucesos desafortunados que pasaré a relatar a continuación. Lo primero que quiero hacer mención son las incontables veces que te piden el pasaporte! Conté como 4! Basta muchachos, estoy empujando la valija, con 3 horas de sueño y 2 tímidas tostadas en el estómago, con la mochila en la espalda cual boliviana transportando a su hijo y el morral con la notebook colgándome de un hombro como si fuera un niño de lo más travieso tirando del brazo de su padre para volver a la jugutería. Para colmo, cuando te hacen el escaneo a ver si tenés desde un rifle hasta una botellita de agua, hasta el antitranspirante me sacaron! Y bueno, qué le voy a hacer, es que preparé la valija a las apuradas... y puse las cosas que no tenía que poner en el lugar equivocado! Hasta tijera tenía! Y si...pero la llevo por si tengo que cortar algún envase. A fin de cuenta, la pobre terminó en la basura y para peor de todo ahora si no me podía cortar nada! Lo que más me dolió fue mi crema protectora que me había costado una alta cantidadde dinero, sumado a una crema para el pelo que me es difícil conseguir! Y bueno, de las experiencias se aprende dicen...no?
Van 6 horas de vuelo...con las 3 horas que tenía en mi saldo acreedor, me da un total de 9 horas sin dormir...pero como hombre precavidio que soy, me pongo a hurgar entre mis pertenencias usando el celular de linterna, en la búsqueda de las pastillas para ir al mundo de los sueños. Tras revolver y revolver inútiles fueron mis esfuerzos tras los cuales mis dedos volvían con boletos o monedas, todo menos las pastillas! Estoy cansado de practicar posiciones de yoga en mi asiento! Me quiero dormir!
A todo esto me viene a la cabeza una frase de un compañero: mike...en el vuelo para que se pase rápido la idea es comer..Minga comer! No me traen nada! Estoy esperando mi café con leche con un triple de jamón y queso!
La comida que sirvieron al mediodía es similar a esas maquetas que hacen los arquitectos, donde podés ver de todo pero chiquitito! Tenés de todo, la cucharita para el postrecito, el tenedorcito para la carnecita! El vasito para el tecito... Pobrecito el que tiene que satisfacer su hambruna con semejante muestra de menudencias!
Bueno, parece que me pegó el sueño, las ventanas siguen cubiertas, pasan una película que no me interesa, la gente parece que duerme, poco silencio...y de repente...el sol??? acaban de destapar las ventanas?? Pero...si yo quiero dormir ahora!! Ah lo que me faltaba...que me digan cuando quiero dormir!! Justo que me había olvidado de las pastillas y usado de placebo un caramelo de mentol, la gente empieza a sacar los dados y jugar a la generala! Ahora si que no me voy a poder concentrar...
Al cabo de 3 horas de haber "comido" mi almuerzo, el estómago vuelve a ponerse en primer plano de prioridades. Veo pasar un azafato y le digo: "I'm very hungry (Tengo mucho hambre)", y el tipo me sonríe y me dice "soon (pronto)". Punto y aparte. Cuando veo venir el carrito con la merienda, y después de la lucha de la cual el sueño y el hambre fueron protagonistas, me entregan un "sanguchito" (sí es todo con "ito" por si no se habían dado cuenta) envuelto en un sobrecito que invitaba a colocarlo en un centro de mesa junto a la fruta de plástico que adornaba cualquier comedor o bien podría caer al pinchar una piñata en un cumpleaños de algún purrete.
Bueno, parece que vamos llegando, cuanto más bajamos la temperatura del aire de afuera más sube! Ahora si...estoy llegando a mi querida Buenos Aires!
Llega el momento de agarrar las cosas y empezar a caminar....
Hasta la próxima!

Mike